Es común escuchar que la carne de pollo tiene hormonas. Los cuales se administran durante su desarrollo para acelerar el crecimiento de las aves. Esta información, sin embargo, es un mito.

Alimentar a las aves con piensos enriquecidos con sustancias hormonales o inyectarlas en las aves está prohibido por Instrucción Normativa del Ministerio de Agricultura, IN No. 17 de 2004, y también por las normas internacionales de exportación.

Además, varios estudios nacionales ya han demostrado que no existen ventajas técnicas y económicas en el uso de hormonas, por lo que su uso es totalmente insostenible para las empresas productoras de carne de pollo.

Pollos seleccionados

La verdadera razón para que los pollos tengan un crecimiento más rápido está en la selección comercial, que no es más que la elección de animales con las características más atractivas, desde el punto de vista alimenticio (pechuga grande y menos grasa), para la reproducción, junto con mejoramiento genético, mejoras en la infraestructura de la granja y nutrición avícola.

Por tanto, es cierto que la carne de pollo es nutritiva, baja en calorías y perfectamente saludable para tu dieta diaria. ¡Disfrutar!